Práctica de bajo impacto en la que prima el control postural estabilizando la columna vertebral, fortaleciendo los músculos de la espalda y tonificando el abdomen. Favorece y mejora la movilidad, la higiene postural, la estabilidad y la fuerza en la zona del core (zona que engloba un complejo muscular situado en la parte central del cuerpo en la que intervienen 29 músculos).